No mientas.

Sé que esto no es un sueño lleno de alegría, abrazos, sonrisas por todos lados ni un sueño donde la gente no te traicione, donde tus amigos no te fallen, etc. Por fin veo la nitidez de la realidad, por fin, mi mundo de color de rosa se vuelve negro, dando luz a toda la verdad, todo el dolor… todas las mentiras de la gente, todas las traiciones ocultadas tras sonrisas falsas, tras amigos que eran reales, que te daban puñaladas a las espaldas…

Creo que ahora estoy hasta más feliz que antes, porque aunque antes todo era extrema felicidad y ahora sea todo extremo dolor, prefiero vivir con el dolor de la verdad que engañarme a mí mismo con la alegría de la mentira.

Mejor decir la verdad aunque duela, a mentir y que la mentira duela más...